Las opciones de vida para los tuyos son numerosas, y cambian según la etapa vital. Si os habéis decidido por una residencia, elegid aquella en la que realmente querrías estar tú: la más segura, la más moderna, la más hogareña…la mejor para vosotros
El paso de ingresar a tus seres queridos en una residencia no es sencillo. Pero si llegado el momento se convierte en un paso necesario. ¿Cómo estamos seguros de elegir la residencia de mayores adecuada? ¿Son todos los centros más o menos iguales? ¿Todas las residencias son idóneas para cualquier mayor? ¿Debemos centrarnos en lo que conocemos, en lo cercano, o buscar la opción óptima según las necesidades concretas?
Para saber cómo elegir residencia de mayores, debes observar el siguiente listado:
1. Servicios estructurales
2. Servicios de atención y cercanía
3. Garantía del centro
Ubicación, más que cercanía
La ubicación, ¿es importante? Sin duda. Pero no hay que confundirlo con la cercanía. Esta puede hacer que se elija un lugar para vivir que no es el idóneo, si este no cumple con todos los requisitos que necesitamos.
Lo que sí deberías asegurar es el fácil acceso para las visitas familiares: conexión con carreteras principales, transporte público cercano y zonas útiles cerca, desde una entidad bancaria hasta un parque, pasando por supermercados y otros servicios de ocio.
El valor de la tecnología y la seguridad. Servicios estructurales
Estas características que debe tener una residencia hacen referencia a factores físicos, tales como el edificio, los diferentes espacios, el equipamiento, las instalaciones y los avances tecnológicos en el cuidado de los mayores.
Unas medidas exhaustivas ante crisis sanitarias
La actualidad cambia el paradigma de cómo elegir residencia de la tercera edad. Se demanda:
Ante una crisis sanitaria, es importante conocer los planes de contingencia del centro: capacidades de sectorización y segmentación de los residentes, los acuerdos con terceros ante una necesidad de derivación hospitalaria masiva, el acceso del centro a EPIs y pruebas diagnósticas en caso de escasez o de no ser facilitadas por la administración, la capacidad y disposición a la reposición de personal ante potenciales bajas, etc.
Una alimentación equilibrada y a la altura de las expectativas
Hay una creencia popular hacia las residencias de mayores y su “baja calidad” a la hora de responder a las necesidades nutricionales de los residentes.
Por ello es importante que se trate este aspecto con atención:
Una tecnología al más alto nivel
La infraestructura de una residencia gana si está acompañada de las últimas innovaciones. Algunos de los ejemplos más específicos que pueden mostrar un modelo moderno de residencia son:
Una residencia con todos los servicios especializados
Hay tres clases principales de residencias. En el primero están las personas con bastante independencia, que no necesitan cuidados de terceras personas. En el segundo nivel se encuentran residencias que ya incorporan servicios de hostelería, atención y cuidado.
El tercer nivel serían centros que, con la segmentación adecuada de espacios y entornos, puedan garantizar el máximo nivel de servicio a personas mayores afectadas de patologías o síndromes de difícil abordaje, que requieren mayor grado de atención y mayor especialización de los recursos empleados. A eso llamamos servicios especializados.
Este tercer nivel ofrece:
Cómo elegir residencia de mayores desde el corazón. Servicios de atención y cercanía
Quieres que tengan lo mejor en tecnología e infraestructuras, pero también que se sientan arropados y cercanos, con un equipo cercano, comprometido y con calidad de cuidados. Estas características hacen de una residencia un verdadero hogar.
Un programa de actividades pensado para su bienestar
Tu familiar tiene unos gustos particulares, unos hobbies específicos y hasta un horario totalmente personal. Busca una residencia que se adapte a él, no lo contrario:
Una forma de tenerles cerca
La situación actual puede ser compleja, pero, en la residencia elegida, debe haber mecanismos para saber cómo se encuentran tus seres queridos.
Comunicación cercana con los familiares, los horarios de visitas (en situaciones normales) suficientemente flexibles, o de atención telefónica, dan también una idea de lo empático de la organización de la residencia.
Comunicación especializada, con informes semanales profesionales sobre el estado de los residentes. Así podremos no solo saber de ellos, sino también conocer su evolución. Recuerda revisar que estos informes estén actualizados en todos los aspectos del bienestar del residente: psicológico, médico, social…
Presta atención a la garantía del centro
En este último punto a la hora de saber cómo elegir residencia de mayores, debemos prestar atención a factores que nos garantizan el “buen hacer”, ya sea desde la propia institución como desde el reconocimiento de otros organismos oficiales.
Una decisión con cabeza
Hay decisiones que no se deben tomar a la ligera. Esta es una de ellas. La situación puede ser urgente, pero debes buscar la residencia en la cual, llegado el momento, te gustaría estar a ti.
Dedica algo de tiempo a reflexionar sobre las necesidades de tu ser querido y encontrarás la opción que mejor se adapta a él. Contacta con cada residencia, solicita toda la información que necesites y ve a visitarlas. Por ejemplo, en Valdeluz Mayores puedes concertar una visita tanto en nuestra residencia en Leganés como en nuestra residencia de mayores en Guadalajara para conocer los servicios y atención personalizada que ofrecemos a nuestros resientes.