Cómo llevar a cabo un protocolo de ingreso en una residencia de mayores con seguridad

Sabemos que es complicado dar el paso de ingresar a un familiar en una residencia. Por ello, la primera opción siempre debe ser el domicilio familiar, ya que en casa es donde mejor van a estar nuestros mayores.  Solo cuando esta opción no sea es posible, deben estudiarse otras alternativas como las residencias. Conforme vamos tomando la decisión, es normal que nos asalten algunas dudas. Preguntas sobre las pautas médicas, el proceso de traslado o las medidas contra el coronavirus. En Valdeluz contamos con un protocolo de ingreso en residencia de mayores exhaustivo y seguro, dividido en tres fases perfectamente estudiadas para dar respuesta a todos los miedos e inquietudes que, como es normal, pueden surgir antes, durante y después del ingreso.

Antes del ingreso

El protocolo de ingreso en residencia de mayores suele iniciarse un par de semanas antes. Es lo que llamamos el preingreso. Nuestros profesionales, en primer lugar, conciertan varias reuniones con la familia para conocer todos los detalles necesarios y poder prestar una atención más personalizada a la llegada del residente. Además de solicitar un informe médico exhaustivo realizado en los últimos tres meses para anotar las patologías existentes y conocer la medicación prescrita, nuestros trabajadores sociales se reúnen con el futuro residente para conocer de primera mano sus necesidades. Todo ello se confirmará posteriormente con la familia para que no se nos escape ningún detalle:

Los familiares, además, pueden conocer de primera mano nuestras instalaciones tantas veces quieran. Salvo en el caso de las habitaciones y algunas zonas comunes que, por protocolo covid-19, aún no se pueden visitar en persona para seguir protegiendo y garantizando la inmunidad de nuestros centros, en los que el 100% de personal y residentes se encuentran vacunados.  A cambio, como reconoce Natividad González, directora de la residencia de Leganés, “en Valdeluz contamos con la última tecnología y el sistema Portal TV permite conocer y recorrer cada rincón de la residencia mediante videollamadas. Incluida la habitación para cuya decoración se trabaja también con antelación”.  De hecho, en esas reuniones previas también sugerimos a la familia que nos facilite ropa y algunos objetos personales para que todo esté listo y los mayores se sientan como en casa en cuanto pongan el primer pie en su nuevo hogar.

Incluso hay residentes que simplemente cuentan con nosotros pasar días o fines de semana sueltos. “En realidad nosotros nos ajustamos a lo que las familias necesitan en cada momento”, recalca Natividad.

Y en el caso de que el ingreso sea sobrevenido, o requiera de mayor urgencia al deberse a un alta hospitalaria, contamos  con planes específicos para reducir el plazo estándar de dos semanas al mínimo. Sin perder un ápice de seguridad y manteniendo la cercanía y profesionalidad que rige nuestro día a día.

El día de bienvenida, clave en el protocolo de ingreso en residencias de mayores

Con el perfil del residente dibujado gracias a las entrevistas previas, llega el turno de las presentaciones. Los nuevos residentes conocen a todo el equipo de profesionales, descubren sus habitaciones, visitan las instalaciones -desde el comedor a la peluquería-, y conocen a sus compañeros. Para ello se les agrupa con personas que presenten las mismas necesidades para ayudarles en su proceso de adaptación, pudiendo realizar con ellos las actividades en un día normal en una residencia.

En paralelo, comienzan las consultas con el personal especializado según las patologías o necesidades de cada residente. Todo ello se realiza con las máximas garantías de seguridad de obligado cumplimiento diario, siguiendo las instrucciones decretadas por el Ministerio de Sanidad y la Consejería del ramo de la Comunidad de Madrid, que exigen la presentación de una PCR negativa realizada en las 72 horas previas al ingreso. Basta con solicitar la prueba en el centro de salud correspondiente, cuyo resultado suele comunicarse con la máxima celeridad para facilitar el proceso. Este requisito es obligatorio para todos los nuevos ingresos incluso si ya han superado un contagio por covid-19 o están vacunados.

Después del ingreso

Como cada caso es distinto y la atención sociosanitaria depende mucho del grado de autonomía o de las patologías que presente el residente, en Valdeluz diseñamos en los primeros 30 días un Plan de Atención Individualizado (PAI) específico para cada residente. Con una serie de objetivos que, como mínimo, se revisan cada seis meses, llegando incluso a realizarse las terapias en la propia habitación si así lo requieren y ajustándonos en todo momento a sus necesidades.

En Valdeluz ofrecemos a nuestros mayores todos los cuidados que necesitan con una atención y un cariño a la altura de lo que se merecen. Más aún, si cabe, en tiempos de crisis sanitaria. Con infinidad de facilidades para que mantengan su autonomía física para prolongar su socialización y esparcimiento durante el tiempo en el que elijan nuestros centros como sus nuevos hogares. Y derrumbando cualquier inquietud que surja al iniciar el proceso de ingreso.