En los últimos días de un paciente en fase terminal, hay acciones que tanto los familiares como los cuidadores pueden realizar para ayudar a paliar los síntomas y mejorar el confort del paciente.
Estas acciones deben ser guiadas por el equipo de cuidados paliativos, que puede ofrecer asesoramiento y soporte específico según las necesidades del paciente.
Aquí ofrecemos las 7 acciones más comunes para tener en cuenta:
- Manejo del dolor y otros síntomas:
– Administración de la medicación según las indicaciones del equipo especializado para controlar el dolor, la ansiedad, la náusea, y otros posibles síntomas.
– Complementar con la utilización de técnicas no farmacológicas como masajes suaves, música, o aromaterapia para ayudar a aliviar el estrés y proporcionar relajación.
- Mantener la comodidad física:
– Asegurarse de que el paciente esté cómodo, cambiando regularmente su posición para prevenir las úlceras por presión y ajustando la ropa de cama para evitar arrugas que puedan causar incomodidad.
– Mantener la temperatura adecuada en la habitación.
- Apoyo emocional y espiritual:
– Estar presente y ofrecer compañía, escuchando al paciente si desea hablar o simplemente sosteniendo su mano.
– Facilitar el acceso a asesoramiento espiritual o religioso si el paciente lo desea, lo que puede incluir la lectura de textos espirituales o la oración.
- Comunicación:
– Hablar con el paciente, incluso si parece no responder. Escuchar música que le guste o leerle algo puede ser reconfortante.
– Permitir que el paciente exprese sus miedos o preocupaciones y asegurarle que se le cuidará y no estará solo.
- Hidratación y nutrición:
– Ofrecer pequeñas cantidades de alimentos y líquidos si el paciente aún puede tomarlos y si los desea. No forzar la alimentación si no es posible o deseado por el paciente.
– Utilizar esponjas húmedas para mantener la boca del paciente húmeda y limpia si no puede tomar líquidos.
- Cuidado ambiental:
– Mantener un ambiente tranquilo y sereno. Esto puede incluir disminuir la iluminación, reducir el ruido y crear un entorno visualmente tranquilo y agradable.
- Consultar y seguir las recomendaciones del equipo de cuidados paliativos:
– Mantener una comunicación abierta con los profesionales que atienden al paciente para adaptar los cuidados a medida que cambian las necesidades del enfermo.
Estas acciones están diseñadas para mejorar el confort de un paciente en fase terminal. El apoyo de la familia y los cuidadores es fundamental en todo este proceso, siempre en colaboración con el equipo médico que acompaña al paciente en sus últimos días.
En la residencia Valdeluz Rivas, disponemos de una unidad especializada en cuidados paliativos y dirigida a pacientes en fase terminal. Si tienes dudas sobre los cuidados a prestar a pacientes en esta situación, puedes ponerte en contacto con nosotros y te ayudaremos a mejorar su confort y calidad de vida en estos últimos momentos.
